Mauro Celentano: "La importancia de adaptar el entrenamiento para hombres y mujeres, respetando sus diferencias físicas y hormonales es alta"

Mauro nos explicaba que, si bien ambos géneros pueden realizar entrenamientos similares en muchos aspectos, las diferencias hormonales, especialmente en relación con la testosterona en hombres y el estrógeno en mujeres, juegan un papel fundamental. La testosterona favorece el desarrollo muscular en los hombres, lo que implica que sus entrenamientos de fuerza pueden enfocarse más intensamente en este aspecto. En el caso de las mujeres, aunque también pueden desarrollar fuerza, los entrenamientos suelen requerir un enfoque diferente debido a sus niveles hormonales, lo que puede reflejarse en la duración, intensidad y tipo de ejercicio.
Además, destacó la importancia del entrenamiento del suelo pélvico, tanto para hombres como para mujeres, subrayando que se trata de una zona crucial que a menudo se descuida. Un suelo pélvico fortalecido no solo mejora el rendimiento físico, sino que también previene problemas como la incontinencia y mejora la calidad de vida general.
En cuanto a las mujeres embarazadas, Mauro aclaró que es perfectamente posible seguir entrenando, siempre y cuando se adapten las rutinas a cada fase del embarazo. Esto implica evitar ejercicios de alto impacto y centrarse en actividades que fortalezcan el core, la espalda y el suelo pélvico, mejorando la resistencia física para el parto y la recuperación posparto.
Por último, habló sobre los cuidados que deben tenerse en cuenta durante la menstruación. Aunque muchas mujeres pueden entrenar con normalidad, es importante adaptar la intensidad en función de cómo se sientan, ya que los niveles de energía pueden variar. Mauro también desmitificó la idea de que el entrenamiento de fuerza puede ser perjudicial o que conduce a un desarrollo muscular excesivo en las mujeres. Afirmó que los ejercicios de fuerza son beneficiosos para ambos sexos, ayudando a mejorar la composición corporal, la salud ósea y el metabolismo.
En definitiva, Mauro Celentano nos recordó que el entrenamiento físico debe ser individualizado, respetando las particularidades de cada persona, ya sea hombre o mujer, y que con las adaptaciones adecuadas, todos pueden alcanzar sus objetivos de manera efectiva y segura.