Un vino alicantino se cuela en la celebración del décimo aniversario de la coronación del Rey Felipe VI
Alicante, 25 de junio de 2024 | El pasado miércoles, 19 de junio, la casa real celebró el décimo aniversario de la proclamación de Felipe VI como Rey de España, evento al que asistieron numerosas autoridades del Estado y condecorados, donde a través de un almuerzo los invitados pudieron degustar un menú de raíces típicamente alicantinas desarrollado por María José San Román, chef del restaurante Monastrell. El vino Triga Blanco, de Bodegas y viñedos Volver, fue el vino seleccionado para maridar el plato principal servido en este almuerzo.
“Para nosotros es un honor que nuestro vino haya sido el seleccionado para un acto tan especial. Nos sentimos muy afortunados y agradecemos a la chef, María José San Román, habernos elegido para un acto tan memorable.”, explica Rafael Cañizares, propietario y enólogo de Bodegas y viñedos Volver.
Este vino, con D.O.P Alicante, se elabora con 100% uva Chardonnay procedente de la comarca del Medio Vinalopó, situada en el interior de la provincia. Gracias a las características típicas del clima y del suelo de la zona consiguen producir unos vinos de sabor intenso y persistente, que casaron a la perfección con el menú servido, compuesto por un entrante, terciopelo de remolacha con binzas de tomate y bogavante, seguido del plato principal, bonito en escabeche al vinagre balsámico de moscatel con algas frescas y, para terminar, milhojas de chocolate con turrón de Jijona.
Esta particular combinación de sabores fue obra de una de las referentes de la gastronomía de kilómetro cero, la vallisoletana afincada en Alicante, María José San Román Pérez, chef del restaurante Monastrell desde hace más de 20 años, que posee una estrella Michelin desde el año 2013. Sus recetas destacan por la innovación, sin olvidar la tradición de la dieta mediterránea a través de la cocina alicantina, y así quiso demostrarlo en este almuerzo conmemorativo.
Rompiendo las normas tradicionalmente establecidas, el almuerzo empezó sirviendo el tinto joven, al que le siguió el Triga Blanco, que se sirvió durante el plato principal. Un vino muy especial y delicado donde las uvas se cosechan a mano en pequeñas cajas para evitar roturas y que es fermentado 100% en barricas francesas. Con él, Felipe VI invitó a todos los asistentes a brindar tras la sorpresa que recibió al aparecer sus hijas y dedicarle, tanto a él como a la Reina Letizia, un emotivo discurso por sus diez años asumiendo el Reinado de España.
Para recordar por siempre esta fecha tan especial para la historia pasada, presente y futura del país, dos ejemplares de la producción limitada de 4.000 botellas de este vino alicantino ya reposan en la Casa Real junto a la minuta del menú servido.