Respira profundamente y visualiza los elementos: la luz de la vela, el aroma del sándalo, la energía de la amatista.

Como ya sabemos, la vida moderna, con sus constantes demandas y ritmo imparable, muchas veces nos deja sintiéndonos agotados, desconectados de nuestra esencia y alejados de aquello que realmente importa.

Hay una verdad que es sencilla y poderosa y es que, dentro de cada uno de nosotros reside una fuente inagotable de energía, lista para ser despertada. Los rituales, con sus elementos simbólicos y su intención profunda, son una herramienta maravillosa para reconectar con esa energía interior.

Para recargarnos en esos días, podemos utilizar una vela violeta,  ya  que este color, se asocia con la transformación espiritual, nos recuerda el poder de renovarnos y crecer, dejando atrás lo que ya no nos sirve. Luego encenderemos un  incienso de sándalo, ya que con su aroma profundo y tranquilizador, actúa como un puente entre el mundo físico y el espiritual. Su fragancia puede purificar no solo el aire, sino también la energía que te rodea. Si no tienes incienso, un aceite esencial o incluso un momento para disfrutar de algún aroma. 

Como piedra utilizaremos, la amatista, que es conocida por su energía de sabiduría y protección, es un símbolo poderoso de equilibrio. Sostener esta piedra en tus manos puede ser una experiencia profundamente sanadora.  Imagina su vibración envolviendote, liberando tensiones y trayendo claridad. Su energía es un recordatorio de que la fuerza que buscas ya habita en tu interior.

Crear un espacio sagrado no requiere de formalidades elaboradas. Puede ser un rincón de tu casa, el asiento junto a una ventana o incluso un momento de quietud al aire libre. Lo esencial es la intención que pongas en ese instante. 

Respira profundamente y visualiza los elementos: la luz de la vela, el aroma del sándalo, la energía de la amatista. Siente cómo todo ello te envuelve, elevando tu energía y renovando tu espíritu.

Mientras haces esto, mantén en tu mente una intención clara, como una afirmación o un deseo. Algo tan simple y poderoso como: “Renuevo mi energía y abro mi camino hacia la paz y la abundancia”.

Estas palabras actúan de manera muy poderosa, afincándose en tu mente y tu alma, elevando tu energía.

Cuando se termine, se puede hacer una petición al universo o a tu ser interio como por ejemplo: 

 “Que mi energía se eleve, que mi espíritu se renueve y que la sabiduría y la claridad me guíen siempre”.

Recuerda que no es el acto físico lo que importa, sino la intención con la que lo realizas. Cada vez que dediques un momento a esta conexión, estarás fortaleciendo tu capacidad para manifestar tus sueños y vivir en sintonía con la energía que fluye a través de todo. En este viaje, los rituales no son solo prácticas; son recordatorios de que la magia está en cada uno de nosotros. Permítete sentirla, vivirla y compartirla, porque la transformación comienza desde dentro, y desde ahí se expande hacia el mundo que te rodea.

Yolanda Salvado es médium y podéis seguirla en sus redes sociales  como “Yolanda Salvado Oficial”, en YouTube,Instagram, Facebook y Tik Tok donde podréis ver sus Lives de Mediumnidad.