La Guardia Civil detiene en Vejer de la Frontera (Cádiz), a seis integrantes de una organización criminal

La Guardia Civil de Alicante ha detenido en Vejer de la
Frontera (Cádiz), a seis personas (tres hombres y tres mujeres), como presuntos
autores de multitud de delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico,
pertenencia a grupo criminal y falsificación de documentos cometidos a lo largo de
toda la geografía nacional y de otros países europeos.

Tras producirse el día 01-03-2019 un intento de sustracción de un cajero
automático ATM instalado en la vía pública en la localidad alicantina de Orihuela
Costa, para lo cual se usó un camión grúa y dos vehículos sustraídos, el Equipo de
Delitos contra el Patrimonio de la Policía Judicial de Alicante inició las
investigaciones tendentes al esclarecimiento de los hechos en la que denominaron
Operación Pobegai.

El trabajo policial sobre estas personas llevó a determinar que formaban parte de
un clan proveniente de Centro Europa, muy conocido por distintas Fuerzas y
Cuerpos de Seguridad europeas debido a que, prácticamente todos sus
componentes, poseen multitud de antecedentes policiales. A los investigados se
les localizó en varias viviendas ocupadas ilegalmente en Orihuela Costa, de las
que fueron expulsados en el mes de marzo.

Durante el tiempo que han durado las investigaciones, los tres hombres detenidos,
presuntamente intervinieron en un total de SEIS robos o tentativas de robos de
cajeros automáticos así como la sustracción de un total de siete vehículos y siete
camiones grúa que utilizaban para atacar los cajeros y que luego abandonaban,
todo ello en las provincias de Alicante, Valencia y Murcia.

El modus operandi empleado por esta banda era el siguiente:

Los detenidos, en ocasiones con más personas del clan, se desplazaban en
conjunto y continuamente por España, viajando -incluidos los niños menores de
edad-, en auto caravanas (algunas de ellas sustraídas y provistas de matrículas
falsas). Por temporadas, normalmente de no más de quince días, se asentaban en
zonas de acampada de la costa en las que hay gran afluencia de turistas dónde
lograban pasar desapercibidos. Una vez asentaban su base, salían todos los días,
por parejas y distribuyéndose zonas, con el fin de perpetrar robos para obtener
dinero en efectivo o efectos para vender en el mercado negro.

La mayoría de los robos los cometían en el interior de vehículos y auto caravanas
de turistas, mientras estos los dejaban estacionados en zonas de aparcamiento
libre a las que acudían para realizar senderismo, ir a la playa o para realizar otras
actividades de ocio o deportivas. También hacían lo mismo en zonas y centros
comerciales.

Los delitos no eran del todo aleatorios o casuales, ya que observaban a sus
potenciales víctimas, incluso con prismáticos, con el fin de constatar si dejaban en
el maletero mochilas o bolsos. A parte del dinero en efectivo, para la obtención de
rédito económico, por tener rápida salida en el mercado negro y unas ganancias
superiores a otros efectos, tenían especial tendencia al robo de material
audiovisual, tal como cámaras de vídeo y fotográficas, cámaras digitales de acción
o deportivas y ordenadores portátiles, siendo los presuntos autores de dos hechos
en los que sustrajeron, a dos operadoras de televisión, gran cantidad de material
técnico, ambos hechos cometidos en la provincia de Cádiz.

Si en los robos obtenían tarjetas de crédito, las usaban para realizar pagos, incluso
por Internet, donde contrataban accesos a plataformas de videojuegos o de
emisión de series y películas. También sustraían o intentaban sustraer dinero en
efectivo usando las tarjetas en cajeros automáticos.

Los individuos especializados en arrancar cajeros automáticos, después de las
campañas de robos y hurtos en interior de vehículos y zonas comerciales, se
reunían en algún punto de la Comunidad Valenciana, donde planeaban y los
ejecutaban, ya que diversos miembros del clan viven en viviendas ocupadas en
esta Comunidad Autónoma.

Durante las investigaciones los detenidos estuvieron asentados temporalmente en
las Comunidades Autónomas de Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana, País
Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia, lugares en los que cometieron gran cantidad
de hechos delictivos, teniéndose averiguados hasta el momento un total de treinta
y siete robos y dos tentativas de robo, si bien la cantidad se estima que puede ser
bastante mayor dada la intensa actividad delictiva manifestada por el grupo.
Durante el tiempo que estuvieron en el País Vasco efectuaron incursiones a
Francia, donde tienen antecedentes delictivos, al igual que en Italia y Alemania.

La gran movilidad geográfica y las serias medidas de seguridad que utilizaban los
componentes del grupo criminal para evitar su localización y su investigación por
parte de las autoridades policiales, hicieron que las complicadas investigaciones
se alargaran varios meses hasta que, finalmente, se detectó su presencia en la
localidad de Vejer de la Frontera (Cádiz), donde se produjeron las detenciones. Se
trataba de 3 hombres de entre 36 y 51 años y 3 mujeres de entre 20 y 49 años,
todos ellos de nacionalidad Bosnia.

Por todo ello, la Guardia Civil les imputó multitud de delitos contra el patrimonio y el
orden socioeconómico, pertenencia a grupo criminal y falsificación de documentos
Tras pasar a disposición judicial, todos ellos quedaron en libertad con cargos.