Energías del universo fin de semana, con Iván
Ranking de horóscopos para el fin de semana del 27,28 y 29 de Septiembre
La astrología es una práctica que estudia la influencia de los astros y planetas en la vida y personalidad de las personas. Se basa en la idea de que la posición de los cuerpos celestes en el momento de nuestro nacimiento puede afectar nuestras características y destino.
El zodiaco se divide en 12 signos, cada uno asociado a ciertas fechas del año y características específicas.
Cada signo tiene sus propias características, fortalezas y debilidades, y la astrología puede ofrecer herramientas para el autoconocimiento y la comprensión de las relaciones interpersonales.
El origen de la astrología se remonta a las antiguas civilizaciones, particularmente en Mesopotamia, alrededor del tercer milenio a.C. Los babilonios fueron pioneros en la observación de los cuerpos celestes y su relación con los eventos en la Tierra. Crearon los primeros horóscopos y desarrollaron un sistema que vinculaba la posición de los planetas y las estrellas con fenómenos terrestres.
A lo largo de la historia, la astrología se extendió a otras culturas. En Egipto, se fusionó con creencias religiosas y espirituales, mientras que en Grecia, figuras como Pitágoras y Platón incorporaron conceptos astrológicos en su filosofía. La astrología helenística, que surgió en el siglo III a.C., combinó elementos de la astrología babilónica con la filosofía griega, estableciendo una base que influiría en la astrología occidental.
Durante la Edad Media, la astrología fue adoptada por los árabes, quienes preservaron y tradujeron textos griegos, además de hacer sus propias contribuciones. En este período, la astrología se consideraba una ciencia y era ampliamente utilizada por médicos y académicos.
En el Renacimiento, la astrología experimentó un resurgimiento, con un renovado interés en la ciencia y la naturaleza. Sin embargo, a medida que la astronomía se desarrollaba como una disciplina científica, la astrología comenzó a perder prestigio. La revolución científica de los siglos XVII y XVIII, con figuras como Galileo y Newton, llevó a un rechazo generalizado de la astrología en el ámbito académico.
En el siglo XX, la astrología experimentó un nuevo auge con el crecimiento de movimientos esotéricos y el interés por la espiritualidad. Se popularizó en la cultura, especialmente a través de los horóscopos en revistas y periódicos.
Hoy en día, la astrología se presenta en diversas formas, desde la astrología occidental hasta la astrología védica en la India. Aunque algunos la consideran una pseudociencia, sigue siendo una práctica muy popular, utilizada por muchas personas para la autoexploración y la reflexión personal.
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