Benidorm, modelo de ciudad turística sostenible en el VII Congreso Internacional de Calidad y Sostenibilidad del ICTE
La ciudad de Benidorm ha sido puesta este viernes como modelo de ciudad turística sostenible durante la séptima edición del Congreso Internacional de Calidad y Sostenibilidad Turística del ICTE, el Instituto para la Calidad Turística Española, que se celebra estos días en Jerez. Allí, el alcalde de Benidorm ha participado en una mesa redonda, donde ha expuesto todo el trabajo de análisis y gestión que se desarrolla en la ciudad y que la ha convertido no solo en el primer destino turístico inteligente certificado del mundo sino también en un ejemplo internacional de ciudad sostenible desde sus tres vertientes: la ecológica, la económica y la social.
Bajo el título ‘Alcaldes 24 horas. Sostenibilidad en las organizaciones turísticas y su impacto en la comunidad local’, la mesa redonda ha estado moderada por la presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, María José García-Pelayo, y también ha contado con la participación de los primeros alcaldes de Águilas, María del Carmen Moreno; Chiclana, José María Román; y Almería, María del Mar Vázquez. Todos ellos, junto a Toni Pérez, han expuesto las particularidades de cada uno de sus municipios y las acciones sostenibles que llevan a cabo en su labor diaria.
“Benidorm afortunadamente hace cerca de siete décadas ya apostó por la ciudad en altura”, ha continuado el primer edil, “lo que hace que en un pequeño término municipal de apenas 38 kilómetros cuadrados tenemos el 61% del territorio libre de edificación. Ocupamos muy poco suelo pero arañamos algo el cielo”, ha señalado para indicar que le gestión de los recursos en este modelo compacto “es mucho más sostenible y más eficiente” que en un modelo expansivo. “Trece Benidorm liberarían de construcción toda la costa española, con una gestión del agua brillante y capacidad para hacer felices a millones de personas todos los años”, ha ahondado Toni Pérez.
La gestión eficiente del agua y el cambio climático han sido también asuntos que ha puesto sobre la mesa el alcalde de Benidorm para explicar que “este ciclo climático no sabemos cuánto va a durar, pero tiene unas consecuencias que ya estamos notando. Una de ellas es la temperatura y la otra, la cuestión hídrica, puesto que ya no podemos fiarlo todo a que llueva o no”. En esta línea, ha expuesto la obra de remodelación integral de la avenida del Mediterráneo, donde “se ha conseguido bajar la temperatura media en tres grados” al reducir de seis a uno los carriles –cuatro para circular y dos de aparcamiento–, bajar a 10 km/h el límite de velocidad y dar más espacio a la vegetación y la creación de sombras.
Sobre la cuestión hídrica, el alcalde ha recordado que Benidorm lleva décadas utilizando en los lavapiés de sus playas agua salada y que en los arenales no hay duchas, “porque entendíamos que el vecino y el turista que sale de la playa llega a su casa o a su hotel y se va a duchar. ¿Qué sentido tiene entonces gastar agua potable?”. Además, también ha enumerado otras de las actuaciones que se están llevando a cabo para la renaturalización de la ciudad. Entre ellas, la incorporación y adecuación de áreas forestales como la de El Moralet o la regeneración de la Cantera del Racó de l’Infern.
La certificación como primer DTI del mundo y el estudio y análisis continuo de los datos han sido, según Pérez, otras de las claves para alcanzar el nivel en el que se encuentra la ciudad, “superando auditorías y mejorando día a día” en los cinco ejes sobre los que se trabaja: “sostenibilidad, accesibilidad, innovación, tecnología y gobernanza”. Por ello, el alcalde ha opinado “que la tecnología no convierte por sí sola un destino en inteligente, sino que debe ir acompañada de un proceso de cambio a todos los niveles”. Un cambio que, a su juicio, se está llevando a cabo de forma exitosa en Benidorm, “que es sinónimo de eficaz gestión de recursos, generación de empleo y redistribución de la riqueza”.
Junto a todo ello, el alcalde benidormense también se ha referido a los impuestos al turismo, como la tasa turística que intentó implantar el anterior gobierno de PSOE y Compromís en la Generalitat Valenciana, insistiendo en el mensaje de “nunca y en ningún sitio”. “Esto es un invento de aquellos que no quieren reconocer que la vida sucede en las ciudades y que seguimos teniendo una mala redistribución de la financiación”, ha expuesto, para reivindicar la necesidad de “financiar los ayuntamientos por la actividad que se produce en cada territorio, que es la que genera”.
En este sentido, ha vuelto a defender que un porcentaje del IVA recaudado por el Estado debe repercutir en la financiación de las ciudades en las que se genera y no solo en las comunidades autónomas, lo que haría que “los alcaldes y alcaldesas estemos motivados para hacer de nuestras ciudades un gran destino, para generar eventos o actividades para atraer a más personas”.
Banderas para las playas
Durante la celebración de este congreso, el ICTE también ha hecho entrega de las banderas ‘Q’ de Calidad, ‘S’ de Sostenibilidad y ‘Safe Tourism Certified’ que reconocen la calidad, la seguridad y la sostenibilidad de playas y puertos deportivos de toda la costa española.
El Instituto para la Calidad Turística de España ha vuelto a reconocer a Benidorm con los tres distintivos que reconocen la excelencia de sus arenales, un reconocimiento que ha recogido la gente de la Fundación Visit Benidorm, Leire Bilbao, de manos de la secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez, y que en los próximos días volverán a colgar de los mástiles costeros de nuestra ciudad.