Angels Castelló, Clara Ribatallada y Joan Lluís Monjo se alzan con los “Premis Altea 2024”

Altea, 25 de marzo de 2024. De un total de 136 originales presentados a la octava edición de “Premis Altea de Literatura i Investigació 2024”, la joven Angels Castelló se alza con el “Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel.la i Prosa”; Clara Ribatallada, consigue el “Premi Altea de Literatura Infantil i Juvenil” y Joan Lluís Monjo es premiado con el “Premi d’Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez”.

 

El acto de entrega de galardones tenía lugar en la noche del pasado sábado en la gala-cena que organiza Premis Altea cada víspera del Domingo de Ramos en Palau Altea. Un acto presidido por el Alcalde de Altea, Diego Zaragozí; la edil de Cultura, Pepa Victoria Pérez; el Presidente de Caixaltea, Sergio Olivares y el alma mater de estos premios, Joan Borja, director de la Càtedra Enric Valor; quienes acompañados por compañeros de Corporación, representantes institucionales, finalistas de los premios, familiares del homenajeado y sociedad alteana, cenaban y departían al son de la “Orquestra Blava” a la espera de conocer los ganadores de Premis Altea 2024, de boca de la conductora del acto, que en esta ocasión era Paqui Cano, profesora y una de las responsables del funcionamiento del Centre d’Interpretació Carmelina Sánchez-Cutillas.

 

Al inicio del acto, Joan Borja agradecía la colaboración institucional que reciben estos premios convocados por el Ayuntamiento de Altea y que “son posibles gracias a las sinergias entre este Ayuntamiento y la Fundación Caixaltea, entidad patrocinadora del Premio Carmelina; la Acadèmia Valenciana de la Llengua; Aila Edicions; el Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert de la Diputación de Alicante; la Cátedra Enric Valor de la Universidad de Alicante y la Generalitat Valenciana”. En la gala de entrega de los Premios Altea 2024 estaban presentes también la presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Lengua, Verònica Cantó; el director de Publicaciones e Investigación del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert de la Diputación de Alicante, Joaquín Juan Penalva. Un año más, como reiteraba Borja, “aunque sea por una día, Altea es la capital cultural de las letras valencianas”.

 

Tras la intervención de Joan Borja, tomaba la palabra la edil de Cultura, Pepa Victoria Pérez, quien era la encargada de conceder el “Premi Estela d’Honor” a la memoria de Francisco Pérez Devesa, “el Mestre Francisco”, en el que se reconoce y pone en valor su trayectoria  en el ámbito de la música como músico, director y compositor.

 

Hijo de José Pérez Albiñana, el Mestre de la Música, Francisco Pérez Devesa, nacido en Altea en 1920 y fallecido en 1991, escribió la música de películas como La estatua, Honorables sinvergüenzas o Cerrado por asesinato y también compuso numerosos pasodobles festivos o de concierto para banda. Fue director de las bandas de música de Altea, Calp y l’Alfàs del Pi. En el caso de Altea, el joven maestro Francisco Pérez Devesa dirigió la banda de la Sociedad Filarmónica Alteanense en una primera etapa desde 1949. Y veinte años más tarde, en 1969, fue el artífice de la reorganización de dicha banda, de la que volvió a ser director entre 1969 y 1974. En el año 1973, después de haberse celebrado una primera edición en 1949, el Mestre Francisco impulsó la segunda convocatoria de lo que actualmente es el “Certamen Internacional de Bandes de Música Vila de Altea”, que cumple este año su 50 edición. Francisco Pérez Devesa es también autor del pasodoble Ida y vuelta, que con el tiempo se ha erigido espontáneamente en un verdadero himno popular de las fiestas de moros y cristianos de Altea, con el que la “Orquestra Blava” clausuraba esta octava edición de Premis Altea en las instalaciones de Palau Altea.

 

En el transcurso de su intervención, Pepa Victoria Pérez, daba la bienvenida a la Gala de Premis Altea, agradecía la presencia de los asistentes y recordaba que era en el año 2017, con el actual Alcalde como edil de Cultura, el momento en el que daba inicio esta aventura de Premis Altea, que a día de hoy ya son unos premios consolidados. “Este proyecto nació con pasión y determinación y con la visión de impulsar y enaltecer la culrua en nuestro País. Hoy, 8 años después, con orgullo, podemos afirmar que Premis Altea continúan prosperando y demostrando fortaleza, pero sobre todo disfrutando de salud” afirmaba la edil de Cultura, quien recordaba que ha sido una edición de récord a la que se han presentado 10 originales en el EPremi d’Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez”; 43 en el “Premi Altea de Literatura Infantil i Juvenil”, y 83 en el “Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel·la i Prosa Creativa”.

 

La edil de Cultura era la encargada de entregar el Premi Estel.la d’Honor a la familia de Francisco Pérez Devesa, en reconocimiento a su trayectoria y aportación a la cultura musical alteana y era uno de sus hijos, José Pérez Grau, el que recogía el galardón. El Trofeo Estela d’Honor, reproducción de la estela funeraria íbera de Altea la Vella, concebido para reconocer y poner en valor la trayectoria de alteanas o alteanos que, ya desaparecidos, han destacado y sobresalido en el ámbito de la literatura, el arte, la creatividad o la investigación. Momento en el que Pérez Grau, en nombre de los cuatro hijos del Mestre Francisco y todos sus descendientes, daba las gracias a Premis Altea por este reconocimiento.

 

Tras la entrega de este premio honorífico era servida la cena a los casi 200 presentes que, sobre las 23:30 h pudieron conocer el nombre de las obras ganadoras y a sus autores.

 

El primero en conocerse era el  “Premi d’Assaig i Investigació Francesc Martínez i Martínez”, cuyo jurado, compuesto por Miquel del Rey Aynat, Maribel Guardiola Savall y Josep Martines Peres, otrogaba a  “Rondallari de Tàrbena” del autor Joan-Lluís Monjo Mascaró.

 

Joan-Lluís Monjo i Mascaró (Tàrbena, 1968) se licenció en 1993 en Filología Catalana por la Universitat de València y en 1995 en Filología Occitana por la Universidad Paul Valéry de Montpellier. En 2022 se doctoró por la Universidad de Alicante con la tesis “El patrimoni rondallístic de Tàrbena Recopilació, classificació i estudi”, que obtuvo una mención honorífica en los premios Sant Jordi 2023 del IEC. Es profesor de secundaria en el CFPA Paulo Freire, Alicante. Sus líneas de investigación se han centrado en la dialectología, la historia y la cultura popular, y se han manifestado en varios artículos y libros.

 

Tras la recogida del Trofeo Penell, esculpido por Serafín Cortés, Monjo manifestaba: “me hace especialmente feliz que este premio lleve el nombre de Francesc Martínez, porque es una personalidad que para mí significa mucho. Es un personaje de nuestra comarca que merece ser reivindicado. Es un referente para los investigadores que hemos centrado la atención en el estudio de la cultura popular valenciana entendida como patrimonio colectivo”. A lo que añadía, “Rondallari de Tàrbena es una colección de 210 narraciones representativas de la tradición oral de Tàrbena. Fueron recopilados a través de un trabajo exhaustivo de encuestas que tuvo lugar entre los años 1981 y 2022. El interés del Rondallari de Tàrbena debe entenderse desde dos vertientes. Por un lado, cabe apreciar el valor de una recopilación de cuentos tradicionales como ésta en el contexto actual, marcado por la pérdida de los depositarios de la cultura de transmisión oral. Los materiales recogidos son testigos de parte de nuestro patrimonio inmaterial, especialmente amenazado por su carácter frágil. Por otra parte, debe verse en el corpus un testimonio del parlar tarbener, una variante dialectal singular en el contexto valenciano por su componente mallorquín”.

 

 

El segundo de los premios en conocerse era el  “Premi Altea de Literatura Infantil y Juvenil”, cuyo jurado formado por David Boteller Mas, Anna Esteve Guillén y Àngels Gregori Parra, decidía que la obra ganadora fuese “Cartes al mar” de Clara Ribatallada i Torelló, quien recogía el Trofeo Aila, del Área de Escultura de la Facultad de Bellas Artes de Altea.

Clara Ribatallada i Torelló nació en Barcelona, pero vive en Arbúcies, la Selva, desde que tiene memoria. Licenciada en Comunicación Audiovisual, es música, narradora y dinamizadora de clubs de lectura y talleres de escritura. Ganó el “Concurs de Narració Oral Joan Bahí 2015”. En 2023 recibió el segundo premio de narrativa en el “Concurs Literario Aurora Bertrana”, Vilada y en el “Concurs Literari de Nou Barris”, Barcelona y un accésit en el “Premi de Relat Breu Maribel Vendrell” de Carlet. Con el cuento infantil “En Tafaner”, publicado en 2023 por el Ayuntamiento de Tona, ganó el concurso literario “La llegenda del conill”.

 

Clara Ribatallada agradecía el premio recibido y explicaba de “Cartes al mar”que  Dolors estudia en la Escola del Mar de Barcelona. Es en 1934 y recibe una carta de Lucía, alumna de una escuela de un pequeño pueblo de Burgos. Empiezan a escribirse y se hablan del lugar donde viven, de sus escuelas y de las cosas que aprenden, del mar, que Lucía no ha visto nunca, de sus sueños... y de la guerra, que estalla y cambia sus vidas. Estas cartas son un medio inventado para contar una historia muy real: la de Dolors Francès, alumna de la Escola del Mar; la de Lucía Carranza, alumna de la escuela de Bañuelos de Bureba; la de Antoni Benaiges, el maestro que prometió el mar; y la de otros muchos alumnos y maestros de aquellas escuelas que quisieron cambiar el mundo desde las aulas. Una mirada, con ojos de niño, en nuestro pasado reciente: para entender el presente y, sobre todo, para construir el futuro.

 

En palabras de Ribatallada, “estoy profundamente emocionada y agradecida por ese premio. Sobre todo, me hace feliz saber que, a través de su publicación, esta novela llegará a niños y familias que podrán conocer así la historia de Antoni Benaiges, el maestro que prometió el mar, y la historia de la Escola del Mar de Barcelona, y la de alumnos y maestros de aquellas escuelas que, hace casi cien años, quisieron cambiar el mundo desde las aulas. La novela es un intercambio epistolar de ficción entre una alumna de la Escola del Mar de Barcelona y otra de la Escuela Nacional Mixta de Bañuelos de Bureba. Pero lo que se explica en estas cartas imaginadas son hechos reales que conocemos por documentos históricos, por el testimonio de personas que vivieron aquellos hechos y, sobre todo, por las publicaciones que hicieron los propios alumnos de la Escola del Mar y de la escuela de Bañuelos de Bureba entre 1934 y 1936. También son reales los nombres de la mayoría de los personajes que aparecen en esta obra, como símbolo de la memoria histórica y como homenaje a todas las personas que participaron de estos hechos y a su ilusión por conseguir una educación y una sociedad mejores. Que los niños y familias de hoy puedan conocer estas historias de nuestro pasado reciente me parece fundamental: explicar el pasado para entender el presente y, sobre todo, para construir el futuro”.

 

Y finalmente se daba a conocer el “Premi Carmelina Sánchez-Cutillas de Novel.la i prosa creativa, cuyo jurado estuvo compuesto por Enric Balaguer Pascual, Carme Manuel Cuenca y Xavier Mínguez, quienes eligen “Pètal” de Ángels Castelló Martínez como la premiada. El trofeo, “La mà del Sol” de Pepe Azorín, era entregado por el presidente de Caixaltea, cuya Obra Social , financia con 5.000€ este premio.

 

 

Àngels Castelló Martínez Àngels, nacida en el Camp de Mirra en 2001, es graduada en Estudios Literarios por la Universitat de Barcelona y ha cursado el Diploma en Cultura, Lectura y Literatura para Niños y Jóvenes en la Universitat de València. Es librera y escribe en un blog personal: “Tempesta - Vida improvisada”. Ha recibido varios reconocimientos de escritura, como el Premio Sambori por “El perfum dels meus records”, 2018 o el “Premi Llegir” de la Fundació Bromera por “Encabir la lectura”, 2021. El relato “Eclipsi” forma parte de la recopilación “Les filles de la nit i altres contes”, 2022.

 

En “Pètal” Catalina se encuentra sola con ochenta y seis años. El primo ha muerto, que se lo llevan, “ya lo he cuidado lo suficiente”, y la puerta cerrada con llave. Siente que nunca nadie la ha amado, ni la ha cuidado, ni le ha deseado el bien. Ahora, en su casa, se entretiene deshilachando los recuerdos y enfrentándose a los fantasmas de quienes han pasado por su vida. La soledad de ahora es la soledad de siempre, y la insistencia en desordenar los acontecimientos es todo lo que no ha entendido y todas las veces no se ha encontrado.

 

“Para mí escribir es descubrir que las cosas sí se pueden decir. Caterina se me enganchó como cuando pelas una mandarina. Hay que hablar de libros, de historias, de literatura. No sé si puedo decir que soy escritora, pero ahora tengo pruebas de que escribo. Es importante tener los brazos fuertes para transportar libros a todas partes. Me hace muchísima ilusión recibir este premio, me siento feliz. Carmelina Sánchez-Cutillas escribía precioso. Es intenso recibir un premio con su nombre”. Declaraba Àngels Castelló.

 

 

Conocidas las ganadoras y el ganador de esta octava edición de “Premis Altea de Literatura i Investigació”, cerraba el acto el Alcalde de Altea, Diego Zaragozí, quien saludaba y agradecía la asistencia de los presentes y daba la enhorabuena a los familiares del maestro Francisco Pérez Devesa “porque gracias a la obra de vuestro padre, abuelo, bisabuelo o suegro, Altea es un pueblo mucho más rico de lo que era antes”.

 

Diego Zaragozí también tenía palabras de agradecimiento para los premiados de ediciones anteriores, jurados y a todos los implicados y participantes en los “Premis Altea” y la gente que hace posible que la Gala se desarrollo con éxito, músicos, prensa, personal de Cultura, Palau, entre otros y en el nombre de Altea, daba la enhorabuena a Joan Lluís Monjo, a Clara Ribatallada y a Àngels Castelló y les daba la bienvenida al palmarés de Premis Altea. “Estamos impacientes por poder leer y conocer vuestros trabajos”, apuntaba el primer edil alteano.

 

Diego Zaragozí hacía alusión a las cifras que ya cosecha Premis Altea como por ejemplo que ya son 24 las obras premiadas y publicadas; 803 los originales presentados, algo más de 100 de media por edición y 97 obras de media que no han sido premiadas.

 

Y de todas las cifras recordadas por el Alcalde, éste destacaba que “ha habido 779 personas que con la misma ilusión, trabajo y dedicación, crearon una obra y la presentaron al concurso y no consiguieron el premio. Pero lo que es seguro es que estas personas y sus obras, junto a los galardonados, son los que hacen grandes estos premios y nuestra literatura, nuestro país y nuestra lengua”.

 

El Alcalde acababa su intervención animando a la juventud y no tan jóvenes, a escribir y compartir sus deseos, ilusiones y proyectos. “En Premis Altea estaremos esperando vuestras obras”.