El Rei Moro, Josep Llorca, de la compañía Moros Tuareg, conquista el público con su travesía por el desierto

La compañía Moros Tuareg, que ostenta el reinado del bando moro, cerró anoche el desfile con un boato que mostraba el recorrido de las tribus nómadas por el desierto. El boato empezaba con un ballet, amenizado por música y coro, que simulaba el sueño del rey tuareg de conquistar Villajoyosa. Tras el alzamiento del campamento, en el que participaban niños y mayores amenizados por un grupo de música étnica tuareg que actuaba en directo sobre una carroza, se representó la travesía por el desierto con una caravana de dunas y palmeras, compuesta por 10 plataformas arrastradas por caballos, entre las que desfilaban dromedarios. 

Los embajadores moro y beduino, así como el Emisario del Rey Moro, Vicent Martínez, también desfilaron sobre camellos. El desfile finalizaba con una larga carroza que simulaba las dunas del desierto sobre las que iba el Rey Moro Josep Llorca, acompañado por más de 100 músicos y varios coros.